Sin cuenta

Sin cuenta, los cincuenta otra vez,
ahora míos los números
como ceniza de aquel fuego.
Ayer imaginados como un larguísimo viaje,
hoy casi distraído los veo que pasan
sin inclinarme solemne ante sus bombos y platillos.
Aquí en mi mente se reitera
cincuenta veces el azul
de un cielo fijo en la bóveda de mi memoria.
Ciclorama azul de mis actos,
fondo para colgarle luceros,
azul de besos al viento y de adviento.
Azul de faldas corridas hasta las caderas,
azules párpados con tangos de Gardel,
azul lloroso, azules sombras.
Azules pétalos húmedos de sereno,
halo azul de la luna y de cuerpos frotándose
como en el experimento orgásmico de Reich.
Azules cincuenta, sin cuenta
los azules días en que azulearse
es azoro azul porque aún azul se vive.

Ricardo Landa, ¿septiembre de 1990, noviembre de 1998? Con remate de diciembre de 2013, redescubriéndome.
Imágenes: Caballo azul Franz Marc; Fontana: cielo y campo 2; internet: Falda de flores; Van Gogh: patio de cárcel.